MIGUEL
FEIDIAS
[ERA LA PRIMERA
ROSA QUE HE VISTO]
Era la primera rosa que he visto,
la plata de la luna contrastaba,
el rojo que brillaba apasionada,
en su puro jardín, ¿como resisto?
Cuantas veces he soñado con rosas,
que olía sus aromas perfectos,
me acariciaban pétalos afectos,
me perforaban agudas espinas.
Bajo la lluvia, desnudo, la adoro,
belleza única, me debilita,
el cruz de la fe, la fiebre del oro,
el rojo del toro, rosa bendita,
y con cuidado su cuerpo desfloro,
mientras qu’ ella suavemente marchita.
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